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¿Cómo se masturba la comunidad de Platanomelón? ¡Descúbrelo!
Hicimos una encuesta de masturbación entre la gente de...
¿Cómo se masturba la comunidad de Platanomelón? ¡Descúbrelo!
Hicimos una encuesta de masturbación entre la gente de nuestra comunidad y... ¡ya tenemos los resultados! Nos encantó leer vuestras respuestas para conoceros un poco más, y queremos compartirlas con vosotrxs.
En Platanomelón tenemos una misión: que todo el mundo pueda explorar su placer y su sexualidad (ya sea a solas o en compañía) de forma sana y sin prejuicios ni tabúes.
Lo primero... ¿qué edad tienen nuestrxs encuestadxs?
Pues, por suerte, ¡tenemos una comunidad bastante variada! De hecho, hemos recibido respuestas de personas desde 20 años hasta 66, lo que nos permite conocer los hábitos de masturbación de grupos generacionales supervariados.
Orientación sexual de lxs encuestadxs
La orientación sexual de las personas que han participado en este estudio de la masturbación es mayoritariamente heterosexual, seguido por un 23 % de personas bisexuales y en menor medida homosexual u otras orientaciones (como puede ser demisexual, asexual…).
Edad a la que empezaron a masturbarse
La edad media a la que empezaron a masturbarse lxs encuestados fue a los 15 años. Sin embargo, llama la atención la diferencia entre personas con vulva y personas con pene... Mientras las personas con pene empezaron a masturbarse con una media de 13 años, ¡las personas con vulva empezaron alrededor de los 16!
Esta brecha pone en evidencia el tabú en torno a la masturbación que sufren sobre todo las personas con vulva en su juventud, lo que conlleva un conocimiento de sus cuerpos y de su placer más tardío. ¡Aunque, por suerte, esta tendencia es cada vez menor!
Frecuencia semanal de masturbación
La media general de masturbación es de 4 veces a la semana. ¿Qué te parece? Sobre todo, nunca tienes que sentirte mal por considerar que te masturbas “demasiado” o “muy poco”. Siempre que te sientas a gusto con tus hábitos de masturbación y lo hagas porque te apetece, ¡está bien!
De nuevo, aquí vemos un desequilibrio entre las personas con pene (5 veces semanales) y las personas con vulva (3 veces semanales). Este dato, de nuevo, evidencia la influencia de los prejuicios sociales en torno a la masturbación de las personas con vulva.
Tiempo dedicado a la masturbación
Ante todo, que sepas que no hay un tiempo “adecuado”. Habrá veces que quieras tomártelo con más calma y dedicarle más tiempo a ese momento contigo mismx y otras veces que sea cuestión de pocos minutos... ¡Veamos cuánto tiempo suele dedicarle nuestra comunidad a la masturbación!
Masturbación con juguetes sexuales
¡Los juguetes eróticos son potenciadores del placer! Por eso, teníamos curiosidad por saber hasta qué punto los incluís en vuestras sesiones de masturbación... ¡Y hemos visto una diferencia abismal entre personas con pene y personas con vulva!
Parece que las personas con pene aún tienen un largo camino de descubrimiento del potencial de los juguetes sexuales por delante.
Masturbación en pareja
Masturbarse en pareja puede tener muchos beneficios, y es que la masturbación es una gran oportunidad para guiar a nuestra pareja por nuestros puntos de placer y potenciar así la excitación... ¿cuánto creéis que practica la gente la masturbación en pareja?
Además, ¿sabías que la mayoría de nuestra comunidad (53,7 %) no disminuye su frecuencia de masturbación cuando está en pareja?
Recursos para la masturbación
La excitación es un ingrediente esencial a la hora de masturbarnos... ¿Y de qué tira nuestra comunidad para ponerse a tono?
Pues... en este caso, la diferencia entre los recursos de las personas con pene y las personas con vulva es bastante sustancial: mientras las personas con pene recurren más a la pornografía, las personas con vulva tiran más de imaginación.
Curioso, ¿no?
¿Cuáles son los motivos principales por los que se masturban?
Pues, por supuesto... ¡EL PLACER! Aunque puede haber muchos motivos por los que nos masturbamos, el placer es el motivo por excelencia.
Autoconocimiento a través de la masturbación
Y, por último, ¿piensa nuestra comunidad que la masturbación les ha ayudado a conocer más su placer y mejorar así sus relaciones sexuales?
¡Pues un 94,4 % de los encuestados piensan que sí! Y es que, ¿qué mejor manera hay de conocer nuestro propio cuerpo y nuestros puntos de placer que la autoexploración?
Por este motivo y por muchos más, ¡manos (y juguetes) a la obra y FELIZ SEMANA DE LA MASTURBACIÓN!
LGTBQ+
El 26 de abril se celebra en España el día de la Visibilidad Lésbica.
Existen muchos mitos alrededor de las lesbianas... ¡desmontémoslos!
El 26 de abril se celebra en España el día de la Visibilidad Lésbica, que pretende reclamar la igualdad de derechos y oportunidades de las personas lesbianas.
¿Por qué es necesario dar visibilidad al colectivo lésbico?
Las mujeres han sido invisibilizadas a lo largo de la historia (y por desgracia aún a día de hoy), y más aún las que tienen una orientación sexual que se sale de la norma.
Por tanto, las relaciones sexuales vulva-vulva también han estado fuera del diálogo social. Esto ha generado una falta de referentes, pero, a la vez, ha dejado espacio para construir prácticas de placer más fluidas y libres.
Lo que no se muestra, no existe de cara a la escena pública. Por eso es tan importante dar visibilidad a este grupo poblacional: para derribar tabúes, mitos y estereotipos y educar a la sociedad frente a la confusión entre términos independientes como son la expresión, la orientación y la identidad sexual.
Puntos de acción para asegurar los derechos de las lesbianas
La identidad lésbica, como la de cualquier identidad ajena a la heteronormatividad, se ve afectada por el estigma y la discriminación. Es importante se apoyen políticas que aseguren un entorno seguro y libre para las personas pertenecientes a estos colectivos históricamente invisibilizados.
Es fundamental que se tenga en cuenta la diversidad de orientaciones a la hora de proporcionar una atención médica, sexual y mental adecuada, ya que puede conllevar unas necesidades específicas (información de educación sexual, de protección frente a las ITS, de atención psicológica específica frente a la discriminación y la violencia homófoba...).
Es muy importante asegurarnos de que las mujeres lesbianas cuenten con todos los recursos para ser componentes de la sociedad de pleno derecho: libres de discriminación en el ámbito laboral, público y privado.
Derribando mitos sobre las personas lesbianas
No es una fase
La orientación sexual no es una fase, ni un periodo de “experimentación” que se vaya a pasar con el tiempo. La orientación sexual es una cuestión muy personal y no está en manos de nadie más que las nuestras propias el definirla en cada momento.
De hecho, los pensamientos o comentarios tipo “ya se le pasará” son una forma de violencia hacia las identidades y orientaciones que se salen de la heteronormatividad.
No significa que odien a los hombres
¡La orientación sexual no tiene nada que ver con tu aceptación hacia el género por el que no te sientes atraídx! Es como decir que un hombre cis hetero odia a otros hombres cis solo porque se siente atraído por las mujeres... Ridículo, ¿no? Pues eso.
No se besan en público porque quieran un trío
Si muestran su amor públicamente es porque no tienen nada de lo que avergonzarse y no tienen por qué ir escondiendo sus muestras de afecto... ¡No porque quieran ser el objeto sexual de nadie!
Históricamente la sociedad ha sexualizado las relaciones entre mujeres, negándoles sus propios deseos para pasar a convertirlas en el blanco del deseo masculino.
Sus prácticas sexuales SÍ son sexo
A la cultura heteronormativa le cuesta aceptar que puede existir el sexo sin la intervención de un pene y sin que haya penetración. Por suerte, el sexo cada vez se concibe de una forma más plural y, aparte de contemplar otras sexualidades más allá de las parejas pene-vulva, se empieza a entender que el sexo no es solo coito.
Sea cual sea tu orientación sexual, mereces ser vistx y respetadx... ¡Feliz día de la Visibilidad lésbica!
relatos eroticos
Finalista del concurso de microrrelatos eróticos
Finalista del concurso de microrrelatos
Me crucé a mi primer amor una calurosa tarde de primavera. Lo vi a través del cristal de una de las múltiples tiendas de la ciudad y no pude evitar ir hacia él.
Quizá fue la estación lo que me llevó a hacerlo y sin pensarlo demasiado. Entré rápida hacia él y unos minutos más tarde ya estábamos yendo hacia mi casa.
Cuando llegamos, fuimos directos hacia la cama. Fue mágico. Acariciaba cada centímetro de mi piel suavemente, haciéndome sentir un cosquilleo al acercarse a mis zonas erógenas, un cosquilleo que me pedía que le gritase: "Sigue, por favor".
Tomaba mis curvas a la perfección, como si siempre las hubiera circulado, haciéndome sentir un placer desconocido en la simpleza de las caricias. Aprovechó cada movimiento, cada zona, cada ángulo, cada escondite, cada centímetro... Hasta el orgasmo.
Acabamos cuando la luna ya se veía por la ventana y el sol primaveral se había escondido.
Así que una vez acabado con mi primer amor, lo lavé, lo puse a cargar y me fui a duchar antes de hacer la cena.
Esteban Liñares Barral
relatos eroticos
Finalista del concurso de microrrelatos eróticos
Finalista del concurso de microrrelatos
Me crucé a mi primer amor una calurosa tarde de primavera. Su presencia era magnética, mi deseo, irrefrenable. La había soñado tantas veces que me parecía conocerla de toda la vida, pero nunca había visto su rostro en la realidad: al fin estabas allí, tan real como el sol que brillaba sobre nuestras cabezas.
La tarde continuó avanzando y nuestras palabras se deslizaron como serpientes por el aire caliente y húmedo. Cada vez que ella se movía, un escalofrío de anticipación se extendía por mi piel.
Me sentía como si estuviera en una habitación cerrada sin aire, como si estuviera en peligro de muerte, mi corazón latiendo tan fuerte que parecía que iba a explotar en cualquier momento.
Cada vez que nuestras pieles se rozaban, la electricidad me recorría como un rayo, haciéndome temblar y anhelar más. Las palabras que salían de mi boca parecían tan vacías en comparación con el fuego que ardía dentro de mí… No podía esperar más, necesitaba que sucediera algo, cualquier cosa. Mi cuerpo se tensaba, buscando una liberación de esa ansiedad que me estaba consumiendo.
TRUENO Y FUEGO
Y cuando la lluvia llegó, cayendo sobre nosotros como una bendición, nuestras miradas se encontraron. Lo supe. Nos acercamos y nos besamos con el ansia de aquellos que han esperado años para entregarse al éxtasis liberador. Nos devorábamos como si no hubiera un mañana mientras nuestros cuerpos se unían en una danza lujuriosa y ancestral.
Mis manos se deslizaban por su piel sudorosa, explorando cada curva y cada rincón de su cuerpo, mientras los gemidos se mezclaban con el sonido de la humedad. La lluvia arreciaba sobre nosotros, golpeando nuestros cuerpos con fuerza y haciendo que cada gota sonara como un opaco tambor en nuestra piel.
La noche nos sorprendió abrazados bajo la lluvia, experimentando cada una de nuestras fantasías más profundas y salvajes. El viento soplaba con fuerza, haciendo que los árboles se agitaran como si estuvieran poseídos por la misma pasión que nos consumía mientras los relámpagos iluminaban la noche, dándonos vislumbres de nuestros cuerpos entrelazados y de los rostros de éxtasis que compartíamos.
La electricidad estaba en el aire, literal y figurada. Nada podía detener el fuego que ardía entre nosotros. La lluvia seguía cayendo, refrescando nuestros cuerpos, tan calientes como brasas ardientes. Cada gota que caía solo aumentaba nuestra excitación, y nuestros cuerpos se movían juntos en la endiablada danza bajo el diluvio de Dios. El sonido de nuestras respiraciones entrecortadas se mezclaba con el sonido de la lluvia: una sinfonía de placer que solo alimentaba nuestro deseo.
CATARSIS
Cuando la lluvia se calmó y los truenos disminuyeron, nos quedamos abrazados, exhaustos, felices. Todo lo que quedaba ahora era el silencio y la calma que seguían a la tormenta.
Incluso ahora, años después cada vez que escucho el sonido de la lluvia, puedo sentir el calor de su cuerpo contra el mío, y el tacto de sus dedos en mi piel.
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