Conceptos básicos para conocer mejor el mundo del pene

Vemos penes por todas partes: un dibujo de pene se puede hacer de manera automática al margen de una libreta, puede ser un acto humorístico o incluso de vandalismo.

Sin embargo, a pesar de verlo tan representado, ¿realmente sabes cómo funciona? ¿Cómo estimularlo? ¿Cómo limpiarlo? A continuación, te explicamos datos básicos y curiosidades sobre esta parte del cuerpo.

¿Qué es el pene?

El pene no es un músculo, sino que dentro de este hay unos cuerpos cavernosos y esponjosos que se llenan de sangre durante la excitación y hacen que se produzca la erección.

La mayoría de los penes cambian mucho su tamaño durante la erección, los conocemos como “penes de sangre”; mientras que hay otros, los “penes de carne”, que varían poco del estado de reposo al erecto.

pene erección

Tus mejores aliados

Tamaño del pene

Hay tantos penes distintos como personas que tienen uno. No se puede generalizar ni en forma ni en tamaño. Hay diferentes tipos de pene, algunos más grandes, otros más pequeños o incluso curvos. No te compares con nadie, tu pene es el que es, y lo importante es aprender a disfrutarlo.

Partes del Pene: Zonas erógenas del pene y cómo estimularlas

El pene tiene muchas más zonas para estimular de las que puedes pensar. A continuación, vamos a analizar las partes del pene:

zonas erógenas pene estimulación

Es la parte donde se concentran la mayoría de las terminaciones nerviosas del pene. Prueba a hacer círculos sobre él con tu dedo índice para despertarlo.

Es una membrana sensible con forma triangular que conecta el prepucio con el glande del pene. Detiene el prepucio para que no se baje demasiado cuando tienes una erección.

Es esa piel que recubre el glande, y su finalidad es protegerlo, mantenerlo lubricado, protegerlo de infecciones y heridas y, por último, proporcionar placer durante el sexo.

La circuncisión es la operación que se hace para retirar el prepucio cuando no se puede hacer de forma manual o genera dolor, lo que se conoce como fimosis. Puedes masturbarte igual y sentir placer con o sin prepucio.

Está formado por cuerpos cavernosos y esponjosos, que son lo que permite que se produzca una erección. Para masturbarte, ponle lubricante y desliza tu mano de arriba abajo con suavidad.

Son capaces de proporcionarnos inmenso placer. Son los encargados de producir testosterona y espermatozoides. Cuando te excitas también se llenan de sangre y se agrandan. Pon lubricante y entretente un rato tocándolos, acariciándolos y jugando con ellos.

Es una bolsa de piel muy fina que sujeta los testículos. En momentos de calor, se estira para alejar los testículos del cuerpo y, en momentos de frío, se encoge para acercarlos. De esta forma regula su temperatura y se asegura así de mantener los espermatozoides con vida.

El perineo es la zona entre los testículos y el ano. Es una parte muy sensible y tocarla mientras te masturbas puede generarte muchísimo placer. ¡Prueba a presionarla suavemente antes de eyacular!

El Punto P, también conocido como próstata, está muy cerca del esfínter. Está lleno de terminaciones nerviosas esperando a ser estimuladas. La próstata se hincha con la excitación y es la encargada de producir el líquido seminal que se expulsa cuando se eyacula.

Mastúrbate

Al masturbarse no solo obtenemos placer, sino que tiene muchos beneficios: generamos sustancias (como la dopamina y la serotonina) en nuestro cerebro que mejoran nuestro bienestar y hacen que nos sintamos felices. Además, sirve para autoexplorarse, conocerse y disfrutar más de las relaciones sexuales.

Hay muchas maneras de masturbarse, cada persona tiene la suya, pero siempre se puede innovar y descubrir cosas nuevas como:

Dale una vuelta a tu técnica de masturbación

Por defecto siempre nos masturbamos rápido y deprisa, como un acto de desfogue, pero ¿por qué ir al grano cuando puedes disfrutar del camino?

  • Para pasarlo en grande estimula de manera progresiva, ve de menos a más, tanto en intensidad como en fuerza.
  • Para jugar es importante elegir un momento de tranquilidad y relajación. ¡No tengas prisa!
  • ¡Cuerpo y mente van de la mano! Dale chispa a tu imaginación con tus propias fantasías eróticas...

Higiene del pene

Tu pene se merece estar igual de limpio que tu piel, tu pelo o tu boca. ¡No te olvides de él! Aquí te dejamos algunos consejos de higiene, pero si quieres saber más, pásate por este artículo.

Utiliza jabón de pH neutro para respetar el pH de esta zona y evitar posibles infecciones e irritaciones. Empieza limpiando suavemente el glande y el prepucio. Desplaza hacia atrás el prepucio y frota esta zona con cuidado pero con ganas para eliminar el resto de secreciones.

Sigue limpiando, el tronco y el vello de la parte superior. Después dirígete al escroto y limpia esta zona con cariño y dedicación. Por último, no olvides limpiar el área del perineo y el ano.

Déjala para el final porque es la zona con más bacterias, y es mejor que no entren en contacto con las otras partes.

Después limpia bien tu mano o la esponja que hayas utilizado.

Para evitar infecciones, orina después de cualquier relación sexual. Te ayudará a eliminar esas bacterias (que se encuentran en nuestros cuerpos) adquiridas durante el acto sexual.

El vello púbico está ahí por una razón muy simple: proteger tus genitales. Y en ningún caso es sinónimo de suciedad. Tú decides cómo ves más guapos a tus genitales, si naturales, recortados o depilados. Si escoges esta última opción, mira bien que no quede ninguna impureza que pueda irritar tu piel.

Prevención ante todo

¿Sabías que el cáncer en los testículos afecta al 1% de las personas con pene? Si se diagnostica en una fase temprana, hay un 100% de probabilidades de remisión. Las posibilidades de padecerlo aumentan si tienes un historial familiar con este tipo de enfermedad.

Obsérvalo, explóralo y pálpalo regularmente para ver si hay cambios en la forma, coloración, textura o tamaño, entre otras cosas.

La autoexploración es tu mejor arma para que puedas prevenir lo antes posible cualquier infección o enfermedad, como el cáncer testicular. En caso de que tengas cualquier duda, acude a tu centro de salud y no te fíes de lo que puedas encontrar por internet.


Cuida y aprende a conocer tu pene para tener una sexualidad más placentera, a solas o en compañía. Y que se te quede grabado: en la diversidad y el cuidado está el placer. Así que acepta tu pene tal y como es y… ¡a jugar!