¡Tener un gatillazo es más normal de lo que piensas!

En las películas y series el sexo es muy fácil, pero lo que has aprendido en la ficción está muy lejos de la realidad: el concepto de persona con pene viril está desapareciendo (por suerte), lo que deja espacio a que todxs podamos mostrarnos vulnerables y, al fin y al cabo, humanxs.

Tener un "gatillazo” es algo mucho más común de lo que piensas entre las personas con pene.

Para disfrutar del sexo deberías sentirte bien contigo, estar en un ambiente que te guste, con una persona que te guste, no crear demasiadas expectativas y dejar espacio a otras prácticas más allá de la penetración.

¿Qué es un gatillazo?

El 50% de las personas con pene tendrá un gatillazo al menos una vez en su vida. Por si todavía te lo estás preguntando, podríamos decir que es un gatillazo cuando el pene no se levanta o cuando de repente se baja y no vuelve a subir, y se da de manera transitoria y esporádica. Pero, ¿cuáles son las causas del gatillazo? Vamos a descubrirlas.

¿Por qué he tenido un gatillazo?

Puedes llegar a tener la percepción de que el sexo es algo mecánico y que el pene es una parte de tu cuerpo que funciona fácilmente: te excitas, se te levanta, tienes sexo y eyaculas.

Qué fácil todo, ¿no? Pues resulta que es un poco más complicado, porque tu pene también está controlado por tu cerebro, y puede haber muuuchos factores que intervengan en tu erección.

  • Estrés.
  • Cansancio y fatiga.
  • Falta de concentración por ejemplo, estás pensado en el curro en lugar de en el momento presente. ¿Alguna vez has probado a practicar el sexo consciente?
  • Ambiente poco erótico: tener un calentón en un lugar público, en el portal de tu casa, hay alguien en la habitación contigua y te da cosa que te oigan, etc.
  • No tener ganas de tener sexo, pero sentir presión por parte de tu pareja o por la presión social.
  • Inseguridad sexual y con tu propio cuerpo.
  • No saber si estás haciendo las cosas correctamente. ¿La solución a esto? ¡Comunicación!
  • Ansiedad por tener que satisfacer a tu pareja.
  • Estar bajo el efecto del alcohol o las drogas.
  • Pensamientos intrusivos: "No duraré lo suficiente", "No conseguiré mantener la erección","Ya no estoy en forma como antes"...

¿El gatillazo tiene solución?

Lo podemos decir más alto pero no más claro: ¡SÍ! Al no ser un problema recurrente, lo mejor que puedes hacer es reírte de la situación y relajarte. Así de sencillo. Aunque seguro que estás pensando que suena muy fácil pero que en realidad no lo es tanto, por eso te damos algún truquillo:

Abraza tus emociones

Aprende a escucharte y a detectar cómo te sientes. Puede ser que tengas un mal día, estés de bajona o simplemente estés triste o estresadx. Todos estos sentimientos son naturales. Si no estás bien emocionalmente, no te fuerces a tener sexo, puede resultar contraproducente.

Escucha tus sentimientos, tus emociones y también a tu cuerpo, te dirán si estás ready para tener sexo; y si no estás con la cabeza para eso, aprovecha y ten una buena sesión de caricias y besos con tu pareja.

Relájate

El día a día nos consume, entramos en una especie de vorágine donde hay que hacerlo todo para ayer, quedar con gente y siempre estar disponible. Y es cuando entra la ansiedad modo ON. Pon el freno de mano y encuentra momentos para cuidarte y, si tienes la ocasión, practica un poco de mindful sex.

5 preguntas con respuesta

Antes de tu próximo encuentro te puedes hacer unas cuantas preguntas para asegurarte de que realmente estás con la cabeza en su sitio para disfrutar plenamente de tu encuentro:

Si ves que el gatillazo se transforma en una cosa frecuente, te recomendamos ir a una consulta psicosexual. Allí te darán claves para trabajar más profundamente tu caso.

El sexo son también besos, caricias y el jugueteo. ¡Así que, juega y olvídate de cualquier presión!